Una buena parte de nuestros pacientes y en cierta forma sus propietarios, han tenido que enfrentarse con la situación de necesitar una cirugía que les ha permitido solucionar algún problema en su salud o que les permitiera, como en el caso de las esterilizaciones, llevar una vida en comunidad mucho mas segura y tranquila para ellos; pero, ¿qué pasa tras esas puertas que se cierran y que muchas veces hace entrar en un estado de ansiedad importante tanto a las mascotas como a sus dueños?

En nuestra clínica se cuenta con reglas muy similares a lo que viven los humanos. Para cada cirugía que se realiza en la clínica es importante explicar que todos nuestros pacientes pasan por un proceso previo de evaluación médica guiado por nuestros médicos veterinarios especialistas acompañados por estudiantes de últimos semestres de Medicina Veterinaria y en donde se dan todas las recomendaciones especificas para cada paciente y su condición particular. En general, el día de la cirugía nuestras mascotas deben llegar temprano en la mañana a la clínica para que sus propietarios puedan adelantar todo el proceso de autorizaciones y consentimientos médicos, así como recibir las últimas indicaciones posibles.

Una vez en el centro quirúrgico las mascotas comienzan a recibir todos los cuidados necesarios para soportar la cirugía, se le coloca en alguno de sus miembros una vía para administración de sueros y medicamentos endovenosos propios de la anestesia que van a recibir, les son administradas dosis de antibióticos y antinflamatorios. También son depilados en el área de la cirugía para poder tener una herida limpia tanto para la cirugía como para el posquirúrgico. Sin importar la cirugía a la que van a ser sometidos los pacientes siempre van a contar con el seguimiento constante de un anestesiólogo veterinario experto en pequeñas especies y su cirugía será realizada por un cirujano especialista en el área específica a tratar; es así como contamos con cirujanos veterinarios especialistas en cirugías de tejidos blandos, ortopedistas, oftalmólogos e incluso odontólogos dispuestos a brindar siempre lo mejor de sus conocimientos para la curación y recuperación total de nuestras mascotas.

Cada proceso quirúrgico y específicamente el despertar de la anestesia es una situación individual que cada paciente vive de una manera diferente es por esto que a veces es un poco difícil ajustarse a un cronograma particular, por esta razón así la cirugía se realice de una manera pronta es muy usual que los pacientes permanezcan buena parte del día en la clínica esperando que se pueda estar tranquilo ante el manejo de posibles alteraciones que se presenten durante un tiempo cercano al fin de la cirugía.